lunes, 14 de noviembre de 2011

La loba y la niña, de Henry Loevenbruk

El druida tenía una energía fuera de lo corriente. Sin duda era muy anciano, pero caminaba sin esfuerzo y su ímpetu era tan evidente como las arrugas que tenía en el rostro. Parecía pertenecer a otro mundo y a otra edad.

Hoy voy a hablar sobre druidas, lobos, magia, enanos, bardos, tiempos de magia y de guerras ancestrales. Todo ello de la mano de un libro que vino de Francia después de conseguir más de 300.000 lectores, que es una trilogía...pero que se puede conseguir a precio de saldo. ¿Quién da más?

Portada del libro "La loba y la niña"
 Editorial: TimunMas

Fecha de publicación: 02/2007

Nº páginas: 320

ISBN: 9788448035624


Precio: 20€ precio de salida (yo lo compré por 5,95€ en Agapea)


SINOPSIS
Alea es una niña huérfana de trece años que vive a las afueras de la ciudad de Saratea, en el condado de Sarre, dentro de Gaelia. Vive como ladrona, robando lo que puede para comer, y con las calles como vivienda. En uno de sus días solitarios, ocurre algo que hace que todo cambie y que la pequeña se encuentre de repente perseguida por todos los poderes de Gaelia.

Los druidas la buscan, para asegurarse de algo, los hombres la quieren prisionera también, los seres malignos empiezan a rastrearla...

Por otro lado, Imala es una loba que no acaba de adaptarse a su manada. Su pelaje la hace diferente y vive con los demás lobos, pero siempre un poco al margen. Pronto tendrá que dejar la manada y vivir en solitario.
Parece que Alea e Imala tienen algo en común, y sus destinos parece que también. 


AUTOR
 Henri Loevenbruck nació en París en 1972. Cursó estudios literarios. Después de algunos trabajos relacionados con el periodismo y la música, a mediados de los años noventa, funda la Science Fiction Magazine junto a un amigo de la infancia. Tras ser redactor jefe de esta revista durante varios años, decide consagrarse a la escritura. Actualmente divide su tiempo entre las novelas y los guiones, y confiesa su inclinación por el thriller, la fantasía y la novela de aventuras.


MI OPINIÓN
Cuando uno se encuentra ante una trilogía la cosa echa para atrás, la verdad...pero en este caso había buenas críticas, la trilogía estaba entera publicada y además, la conseguí a precio de saldo (los 3 libros por 18€ más o menos). Tampoco era tanto el riesgo. ¿Cumplió mis expectativas? Por lo pronto, el primer libro sí.

Tenía ganas de novela fantástica y esta historia la tenía reservada para un momento así. Ha sido una gran lectura. El ambiente céltico de Gaelia en la época de los druidas, con sus poderes, ha sido algo que me ha gustado mucho. Teniendo en cuenta además de que son poderes cercanos a la naturaleza, y que el elemento natural se tiene en cuenta en la historia.

El libro además está hecho en un mundo “completo”. Hay reinos, hay políticas entre reinos que se hacen notables, hay varios grupos que tienen o que intentan hacer valer su parte de poder, desencuentros entre la religión de los druidas, que creen en varios dioses y sobre todos los dioses en La Moira; y por otra parte los cristianos, que hace poco que han llegado a Gaelia y andan imponiendo su creencia en un sólo dios muy concreto...hay un buen trabajo del escritor, desde luego.

En cuanto a criaturas, aparte de los humanos (obviamente), nos encontramos también con algún enano, con una especie de raza de gigantes, con duendes de la naturaleza y con silvos que viven y cuidan del bosque. Mención aparte para los lobos. La parte de la loba Imala está narrada de una forma buenísima. El autor se mete dentro del animal, describe sus pensamientos y sentimientos, y realmente tiene mucha credibilidad y son partes en la lectura que se disfrutan.
Los personajes en sí tienen cada uno su carácter definido y se reconocen por sus palabras. Obviamente la protagonista es la mejor llevada y en la que se ve más una evolución. Alea, una niña que pasa de ser una niña más o menos madura a ir convirtiéndose en mujer, en alguien que ve cómo va cogiendo unas responsabilidades. Es interesante ver el desarrollo de esta protagonista femenina.
¿Aburrimiento? Aquí no lo hay. Cada capítulo sigue varias tramas, avanza un poco con la acción que llevan a cabo varios personajes, y el salto de un lugar a otro, lejos de liarnos, lo que hace es enganchar a la lectura, que queramos seguir, que queramos ver qué nos vamos a encontrar en cada frente abierto. No hay capítulos “de relleno”, siempre está pasando algo nuevo, siempre se avanza a un punto que lleva las cosas un término más allá y las complica cuando parecen solucionadas, o las soluciona cuando parecen complicadas.
La narración es en tercera persona del pasado, aunque hay trozos en los que se describen sueños, que el tiempo narrativo pasa al presente y la voz a la primera persona, en vez de al narrador omnisciente. Es un efecto muy bien conseguido. Hace que el lector se meta dentro de la situación, que viva también el sueño en cierto modo.
El estilo es claro y sencillo, optando más por la acción y los diálogos que por la descripción, pero sin carecer de ella. Diálogos que no son vacíos, sino que muestran parte de la acción y sobre todo, de los personajes. La forma de expresarse también es parte de sus personalidades. El hablar misterioso de los druidas, el hablar simple y simpático de los enanos, el parco hablar de los seres malignos...
Hay viajes y recorrido por la tierra de Gaelia, pero también hay que decir que no tendremos ningún problema ni nos perderemos porque (y odio cuando no está), hay un mapa en la parte inicial del libro, con todo: la división por reinos, las ciudades, los bosques señalados, las grandes cordilleras, ríos... punto muy positivo para este libro. La edición en general está muy bien cuidada: tapa dura y sobrecubierta.
Yo no lo veo como un defecto en este caso porque compré los 3 libros de la trilogía de una vez, pero sí que considero interesante advertir de que no son autoconclusivos. El primero queda a la espera del siguiente, no se cierran las cosas, sino que se nota que aún hay mucho por descubrir, mucha historia por disfrutar. Y no se qué dará de sí el siguiente, pero La loba y la niña tiene muy buena nota para mí.

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