El cielo en un infierno cabe, de Cristina López Barrios

Toledo se alzaba majestuosa sobre la colina, esculpida por un frío azul. La humedad del Tajo escalaba las veredas con telarañas de rocío, y penetraba por las puertas de la ciudad para deslizarse como una serpiente luminosa por calles y plazas.

Editorial: Plaza&Janes

Fecha de publicación: 2013

Páginas: 624

ISBN: 9788401354267

Precio: 20€ paper-book / 4,74€ ebook

SINOPSIS

En plena época del Tribunal de la Inquisición española, una mujer se presenta a declarar como testigo en un caso particular, en el que se está juzgando a una prisionera que se dice que puede sanar a los enfermos con sus manos. A través de la voz de la testigo, empezaremos a conocer la historia de la acusada.

AUTORA

Cristina López Barrios es una autora española licenciada en derecho. Como escritora ha publicado "La casa de los amores imposibles", con la que cosechó gran éxito, "El reloj del mundo", y "El hombre que se mareaba con la rotación de la Tierra", con la que ganó el Premio Villa de Pozuelo de Novela Juvenil.

TRAS LA LECTURA

Tras terminar este libro tengo la sensación de estar ante una de esas lecturas a las que volver pasado un tiempo. De esas que notas un pálpito cuando llegas al final y una nostalgia te invade por un momento. Desde que comienzas a saber sobre la historia de los dos pequeños huérfanos, Bárbara y Diego, unidos por el capricho de otra huérfana, ya no puedes dejar de querer saber más. Sus vidas son atrayentes y te atrapan en una trama perfectamente urdida por la autora.

La historia, ambientada en la época inquisitorial, muestra desde sus primeras páginas el gran trabajo de documentación llevado por la autora. Y lo muestra sin hacer alardes de ello ni caer en el error de dar lecciones de historia. La documentación resiste también sin problemas no sólo la ambientación, sino otros temas como la magia cabalística, la alquimia o la estructura de un tribunal inquisitorial.

Lo que en un principio parece ser la narración del recuerdo de una historia, a manos de un personaje que conoció a los huérfanos, llega a ser aventura presente y coge más forma a medida que tanto la narradora como los escuchantes cogen forma y personalidad. Todo está tejido de forma que encaja poco a poco, incluso con sorpresas que se desvelan en el momento preciso.

Los personajes, sobre todo los principales, de los que observamos su vida desde recién nacidos hasta que son adultos, evolucionan dentro de la concordancia de sus caracteres de niños. También evolucionan sus relaciones entre sí y con el resto de personajes convirtiéndose en sólidos y tangibles para el lector, en amigos de los que querer seguir descubriendo cosas. Los secundarios demuestran no estar porque sí y encajan con la historia, incluso en la forma en que entran o salen de ella.

Recomiendo con ímpetu este libro, que está a la altura de mis mejores lecturas. Me ha hecho sentir emociones mientras leía, y eso es ni más ni menos lo que le pido a un buen libro.